Aprovechad, pues, lo que se
os da en ese mes, el mes que más teme satanás, porque si os unís, con esa
fuerza tremenda del Santo Rosario, lo podéis vencer.
Rosario - Mensaje ÚNICO
Mensaje de la Santísima
Virgen María al Profeta J. V., el 12 de Agosto de 2023
https://vocesprofeticas.blogspot.com
Habla La
Santísima Virgen María:
Hijitos
(Lenguas...)
Visión:
Se presenta nuestra Madre, cargando al Niñito Jesús, Ella trae una corona, se
ve majestuosa.
Hijitos
Míos, mucho le habéis fallado a Mi Hijo, estáis fallando a vuestra alma, estáis
fallando a vuestro Dios y Creador, le estáis fallando a vuestra vida, a vuestra
vida espiritual, le estáis dando demasiado valor a vuestra vida humana. Os
estáis perdiendo, Mis pequeños, y no os dais cuenta de ello.
Satanás
os manipula de una forma tan sutil y tan tremenda, y que os desvía del
verdadero camino que debéis tomar hacia Dios, vuestra salvación, y os vais
dejando tomar por satanás, y os va llevando hacia la maldad, hacia el error,
hacia la perdición eterna.
Todo lo
que viene del Cielo, todo lo que se os anuncia, es para bien vuestro, es para
vuestra salvación, es para que tengáis una vida asegurada en la Tierra, que,
después, gozaréis en el Reino de los Cielos. Satanás va debilitando vuestra
espiritualidad, y os va llevando al error continuamente, y estáis en ello
ahora, Mis pequeños, nuevamente.
Antes de
que empezara esa supuesta pandemia, se le reveló a Mi hijo Javier, que el arma más poderosa de satanás contra vosotros, es el
miedo, y lo visteis durante ese tiempo, en donde, los poderosos del
mundo, guiados por satanás, os maltrataron y os siguen maltratando, de una
forma tan dolorosa, que hasta en el Cielo veíamos sufrir a vuestra pobre
humanidad.
Mis
pequeños, ahora, os siguen manipulando y, nuevamente, tendréis una prueba
fuerte que deberéis pasar. Se os viene
anunciando, por medios, no deseados del Cielo, que este mes de octubre vendrá
algo fuerte para vosotros, y nuevamente, es el miedo el que os hace sufrir, el
que os hace desviaros de vuestra espiritualidad.
Se os ha dicho que, de qué os sirve que vosotros protejáis
vuestro cuerpo y vuestras pertenencias si no os las vais a llevar, y vuestra
alma, a la que debéis proteger, ¿qué cuidado le estáis dando?
Mis
pequeños, el mes de octubre, mes del Santo Rosario, mes Mío, de vuestra Madre
Santísima, le teme inmensamente satanás, por eso os desvía, ya desde ahora,
para que vosotros no le deis a ese mes, Mi mes del Santo Rosario, el debido respeto
y cuidado que le debéis dar.
Os digo
que si vosotros, todo el mundo, os unierais en rezar el Santo Rosario durante
ese mes, le quitaríais la gran fuerza que le habéis dado a satanás, y lo digo
así: que le habéis dado a satanás, porque os habéis alejado de la oración, os
habéis llenado de miedo, de terror y le estáis quitando la seguridad que os da
la vida de oración, principalmente la del Santo Rosario.
Debéis
crear una muralla inmensa, contra las fuerzas de satanás, y que esa muralla,
cubra a todo el mundo contra las fuerzas de satanás. Tenéis ese poder vosotros,
¿por qué os asustáis de las fuerzas de satanás, si no es nada poderoso contra las
fuerzas del Santo Rosario? Me teme a Mí en una forma tremenda, y no lo
aprovecháis, Mis pequeños, os seguís asustando, en lugar de poner el remedio
que debéis ponerle, utilizando esa fuerza inmensa del Santo Rosario.
Con lo que hablan por allá, os tratan de atemorizar, pero es
satanás el que os trata de sacar de la verdadera devoción que debéis tener para
protegeros.
Se os
dice que vendrán grandes acontecimientos fuertes para la humanidad, y no os
dais cuenta que éstos empezaron ya, cuando Mi Hijo os avisó hace un año, más o
menos, que empezaría ya, la fuerza de la destrucción contra vosotros, que la Misericordia
había terminado y entrabais ya en vuestro Juicio, Juicio Final para muchos, por
la destrucción que se vendría, porque muchos os habéis olvidado ya de la vida
espiritual y Le habéis dañado inmensamente Su Sacratísimo Corazón.
El Tiempo
de la Justicia está ya sobre vosotros desde hace tiempo, y apenas, otros, dicen
que vendrá en ese mes, en Mi mes, que aterra a satanás. Seguís siendo ese
pueblo de cabeza dura, como lo fue el pueblo en Egipto, el pueblo en el
destierro, el pueblo en el desierto.
Buscáis
nada más vuestro bien, buscáis nada más el placer, buscáis nada más el gozar de
las cosas del mundo y no volteáis a ver al Cielo, por eso hay tantas almas que
se están perdiendo.
Tantas
almas que ya no quieren ver hacia su Creador, a su Salvador, ya no quieren ver
a Mi Esposo, que Vive en vuestro interior, El Santo Espíritu, que os indica
hacia dónde debéis ir, el cómo debéis evitar lo que satanás os está causando en
cada uno de vosotros.
Entended
ya, Mis pequeños, del cómo satanás os está atacando, con el temor, y no lo
queréis evitar, porque no tenéis Fe. Fe en vuestro Dios, que solamente quiere
daros el Bien para vuestra salvación. Le atendéis más a satanás y los temores y
todo lo que hace para atemorizaros y llevaros a la perdición, que a Nuestros
anuncios Celestiales que os quieren llevar a vuestra salvación eterna.
Estos
hijos, estos hijos necios que llevaron a Mi Hijo hacia la Cruz. Se dio por completo
por vosotros, Se dio para apartaros y protegeros de las fuerzas de satanás y no
queréis entender, no queréis apreciar lo que se ha dado por vosotros.
Os vuelvo
a anunciar: que tendréis esa prueba, pero es una prueba personal, si seguís
aceptando lo que satanás quiere hacer con vosotros, llevaros al temor, llevaros
a la inseguridad, porque no tenéis Fe, porque os falta oración, porque no
queréis ver hacia el Cielo, sucumbiréis, sucumbiréis porque seguiréis los
consejos de satanás y, como tantas almas en el pasado han sucumbido, también
ahora, sucumbiréis vosotros, si no entendéis a tiempo.
Aprovechad,
pues, lo que se os da en ese mes, el mes que más teme satanás, porque si os
unís, con esa fuerza tremenda del Santo Rosario, lo podéis vencer, o al menos,
le quitaréis muchísimo poder y protegeréis todo lo vuestro, especialmente, vuestra
alma.
De
vosotros depende que sigáis en vuestra vida, como la quisisteis llevar
antiguamente, cuando se vivía en el Bien, o que ahora, que alrededor del mundo
se vive tanto mal, si no ponéis de vuestra parte, sucumbiréis.
Mi Amor
está con vosotros, Mis pequeños, Soy vuestra Madre, La Siempre Virgen María, que
os protege, que os cuida y que os quiere llevar hacia la Profundidad del
Corazón de Mi Hijo Jesucristo.
Os amo,
Mis pequeños, que la Paz quede con vosotros.