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domingo, 25 de abril de 2021

EL TIEMPO DE LA MISERICORDIA SE TERMINO, VIENE EL DE LA JUSTICIA DIVINA: VIRGEN DE GUADALUPE

 EXTRA URGENTE Y DE GRAN TRASCENDENCIA

¡EL TIEMPO DE LA MISERICORDIA SE TERMINO, VIENE EL DE LA JUSTICIA DIVINA!

Mensaje de la Santísima Virgen María a Sus hijos del Mundo entero, dado el domingo 18 de abril, 2021

en el Cenáculo de Oración de los Apóstoles de los Últimos Tiempos

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 Imagen Milagrosa de la Virgen de Guadalupe

Habla la Siempre Virgen María:

Hijitos de Mi Corazón, hoy vine a ustedes para decirles y hacerles ver que el mal se ha extendido por el Mundo a falta de la conversión de muchos hijos de Dios.

Muchos han dejado crecer el mal en sus corazones, más preocupados por las cosas que han de pasar, las cosas del mundo y que no trascienden más allá de lo terreno, de lo mundano. Han dejado la oración de lado, el rezo del Santo Rosario que los protege de las garras de los demonios.

Algunos jerarcas y sacerdotes, seguidores del “modernismo” que infiltró Benedicto XVI desde el Concilio Vaticano II, se han vuelto peores y más culpables a los Ojos de Mi Hijo porque los han dejado a la deriva de ideologías erróneas, falaces y dañinas que confunden el pensamiento y la moral de Mis hijos, ante perversas ideologías diabólicas, herejías y blasfemias de quien ocupa hoy la Silla de Pedro en el Vaticano tomada por las fuerzas del mal.

Multitudes serán entregadas como ovejas al matadero bajo las orientaciones perversas de la planeada pandemia, muchos asesinados y muchos otros que resultan, tras vacunarse, con severos daños provocados por las vacunas que solo inyectan muerte y otras enfermedades, es un plan maligno de muerte a cuya tarea se han sumado en complicidad los medios de comunicación que están al servicio de los enemigos de Mi Hijo Jesús, de Su verdadera Iglesia y de la humanidad entera.

El mal puede tocarles, pero nunca tendrá su corazón y menos su alma si se mantienen firmes a la Fe y enseñanzas de Mi Hijo, porque no se condenarán.

Debo decirles que el Tiempo de la Misericordia se terminó, e inicia el Tiempo de la Justicia Divina.

Luchen y crean en Mi Hijo y en Mí, conságrense a Mi Corazón Inmaculado con sus familias, esta es la última oportunidad para hacerlo.

Satanás y sus demonios los tratarán de confundir, sobre todo porque la Cabeza de la Iglesia de Mi Hijo en la Silla de Pedro está atrapada por el mal.

Muchos se dejarán llevar porque el falso Pastor de la Iglesia entregará a las iglesias al matadero, las vacunas, la pandemia y demás enfermedades, es un plan maligno de muerte, manténganse firmes a la verdadera Iglesia de Mi Hijo Jesús, a sus verdaderas Enseñanzas, Nosotros los iremos conduciendo.

·       REMEDIO REVELADO POR LA SANTISIMA VIRGEN CONTRA CORONAVIRUS Y DEMAS VIRUS QUE LANZARAN CONTRA USTEDES.

El remedio para que sus cuerpos físicos sean fuertes y tengan anticuerpos ante el Coronavirus y los demás virus que tienen preparados para ustedes los illuminati con sus laboratorios, y que lanzarán contra la humanidad, es una planta llamada “Artemisa Annua” o “Ajenjo chino”, es un poco amarga por lo que se prepara como Té y se endulza con miel o sustituto de azúcar Stevia, pueden tomarla en infusión.



Los volcanes, como ya se los había dicho anteriormente, van a despertar.

La Naturaleza va a limpiar la Tierra del mal que la misma humanidad provocó.

Mi Corazón, es el único lugar en que Satanás no ha podido ni podrá entrar, eso le da mucho coraje, escuchen con atención y cuidado hijos Míos, esta es la última oportunidad para consagrarse a Mi Inmaculado Corazón al que NO PUEDE ENTRAR SATANAS.

Así, muchos podrán salvarse de la terrible Justicia Divina que se acerca, sin embargo, no teman, si se mantienen firmes, les vuelvo a repetir, estarán protegidos por Mí, por Mi Amor, resguardados en Mi Corazón.

La “confusión y el miedo” es la mejor arma de Satanás para llevarse almas al infierno, donde vivirán el castigo eterno por haberse separado de su Padre, por eso promueven la confusión desde el Vaticano, para entregarle más almas a Satanás.

No teman hijos Míos, manténganse juntos y oren hasta el final.

Su Madre que los ama y los protege con Su Amoroso Manto.

Amén, amén, amén.

¡Ave María, sin pecado concebida!